Fimer

Cesto de Naranjas

Pasó, me desplome junto al cesto de naranjas

La ansiedad me impedía pararme,

Implosionaban mis tejidos por lograr escaparse,

Pasó, que de pronto entendí sueños y pesadillas constantes.

 

Era una ansiedad perenne,

Envuelta en la fantasía de ya contenerte,

Palabras inflamables todas ellas hilaste al aire,

Atrapadas en mis costados comienzan a incendiarse.

 

Y aún perezco en el suelo inmóvil,

Junto al cesto que ligue indisolublemente a tu estancia,

Llegaste tímidamente con sonrisa condensada,

Y me preguntaste dulcemente cuántas naranjas junte al esperarte.