JOHNWWWW

LA ENAMORADA

Tecleaba precisa

las islas plásticas de la computadora,

su pensamiento angustiado decía

“que estará haciendo”

mientras el bárbaro jefe la gritaba

“ si señor  aquí esta su tinto”

ella ordenaba alfabéticamente las listas

y se repetía  así misma

“ojala me llame”

otra frígida encomienda  llegaba

“tome asiento por favor”

y su alma  adolorida gritaba

 “ojala al fin se decida por mí ”

el teléfono estridente  vociferaba

 “si señor la carta que me pidió”

discutía con los  proveedores

mientras su sangre desesperada decía

“todo lo he dado ya 

 el internet  se apeñuscaba en el aire  

  “señor  por favor  firme el cheque”

el reloj  marcaba las seis  en punto

y su alma intranquila  decía

“ojala pueda escapársele a  la mujer”,

corría  hacia repleto el bus chatarra

y su respiración  ansiosa  decía 

“que debo ponerme”

sus nervios lanzaban azotes

sobre la cabrona rutina oficial,

y así  podía durar años y años

aquella pretendida eficiente;

pero una bala sedienta

vino desde una remota esperanza

un proyectil  blanco albino de sal

disparado por el mar,

atravesó exasperado y feroz

las estalactitas de los cielos

 hasta  las flores  de esas ilusionadas carnes,

así durmió sosegada y por siempre

ella que era un ángel  también

ella  que ya  no  podía soportar

para  su corazón otra traición más.

 

 JOHN WILLMER