Jesús Lantigua

TUS OJOS

La pupila que me atrapa

con su señuelo turquesa

le revienta la sorpresa

a la sonrisa que escapa.

Toda la visión me empapa

desde un mar que se imagina.

Y, ahora, que llega y fulmina

cada espacio de la mente

un océano vidente

me enamora la retina.