Horas que pasan...
Minutos impregnados y dolorosos
que, arrancan centímetro a centímetro el amor;
DÍas amargos, meses sin retoño...
Sin remedio, sin amor...
Tiempo que no fue amigo,
verano que no fue mi aliado,
otoño que secó mi corazÓn,
¡Lágrimas han caÍdo!
¡¡Sangre se ha derramado!!
¡¡¡El Olimpo se ha quemado!!!
Morfeo es mi único consuelo,
la parca, con su voz opaca,
acerca mis pensamientos hacia ella...
Un corazón humillado y,
un alma destrozada.
Aquellos invisibles lloran,
sus alas han caído y, su luz ha desaparecido,
una voz en el viento,
se acerca a mi oído,
y clama con dolor diciendo:
¡Nos volveremos a encontrar y entonces...
Nos empezaremos amar!