En homenaje a:
Juana Antonia Moncada de Chacón
Al cumplirse Mañana 31/7/2015, 100 años de su natalicio.
Recuerdo tus canciones de arrullo maternal
que me hacías peticiones con el, duérmete ya,
Que tengo muchas cosas aún por realizar
Y si tú no te duermes se me hace tarde ya.
Dormite mi niñito que yo te cantaré
Al vaivén de la cuna una y otra vez,
Después que tú te duermas pendiente estaré,
Vigilando tu sueño, y haciendo de comer.
Envuelto en mi tristeza hoy he vuelto a llorar
Al recordar tus cantos que ya no escucho más,
Y sólo tus recuerdos me suelen consolar
Y las aves del campo con su alegre trinar.
Se hace corta mi vista mirando el más allá
muy inquieto por verte, por saber en dónde estás,
te miro en cada sombra que mis ojos ven pasar
y es este mi consuelo la respuesta a mi pensar.
Vivo en sueños que has vuelto a regresar
despierto de los sueños, te busco dónde estás,
y nada ven mis ojos, pesadumbre es mi estar
Tan sólo hay en mis manos el tiempo y soledad.
Se hace oscura la tarde, la noche mucho más
sensible entre mis penas acudo a mi señor,
requiero de sus fuerzas, ¡Dios mío por favor!
quiero seguir llevando conmigo este dolor.
Es un dolor de madre que la vida segó,
y seguirlo viviendo por tu sagrado amor,
que reside en mi alma, con todo el corazón
despierto ya cansado, nunca puedo llegar.
He perdido tus huellas, madre dónde estás
seguro que en el cielo los ángeles dirán
o no las ven mis ojos cansados de mirar
o se lavó la tierra cansada de esperar.
Se borraron las mías que acabo de tatuar
dejé mis pies desnudos la hierba creció ya,
la comen los caballos viajantes sin parar,
y me dicen las aves alegras sin cesar
camina, mas camina que pronto llegarás.
Pero ya mi cansancio se agotó en el andar
limitadas mis fuerzas no te puedo encontrar,
y sólo acudo a Dios que esta en el altar
sentado a tu derecha de tu reposo en paz.
Después de haber cumplido tu tiempo terrenal
cumpliendo sus misiones, rezar, orar, rezar
por él también orar, y darle yo las gracias
de rodillas en su altar por tenerte en la gloria
posada en tu sagrario diciendo con sus cantos:
Amen, Amen, Amen.
Hoy lleno de caricias y besos a tu tierra.
Mi tierra, porque en ella estas,
Y mañana si no más, en mis cenizas regresar quisiera
a estar contigo en el osario de tus huesos por la eternidad.