El Bardo Muerto

SI ME QUISIERAS

Si me quisieras, el frío de mi corazón se transformaría en una centinela de pasión.

 

Si me quisieras, los océanos apagados y solitarios se volverían abundantes y claros.

 

Si me quisieras, no habría un final solo eternidad compuesta de felicidad real.

 

Si me quisieras, ya no habría un melancólico atardecer sino un deslumbrante amanecer.

 

Si me quisieras, ya no estaría perdido en los vicios mundanos solo pensaría en amarnos.

 

Si me quisieras, el alma ya no hablaría de tristeza solo de belleza, como la tierna Naturaleza.

 

Si me quisieras, las sorpresas y alegrías de la vida se juntarían en una reacción del día a día.

 

Si me quisieras, echaríamos de lado los complejos de la sociedad y entraríamos a la verdadera eternidad.

 

Si me quisieras, los poetas muertos de amor resucitarían en un solo gozo de clamor.

 

Si me quisieras, ya no escribiría por un ideal sino viviría por tu amor real.

 

Si me quisieras, ya no habría cuerpos en desdicha ajena  sino almas gemelas libres de su condena.