Ninfa de cristal 🧚

KENDRA

Es tan obesa que me confundí,

¡Creí que ladraba un cerdo!

y eso mismo le advertí.

Era kendra la perrita de mi hermano,

que de tanto que ha comido

se ha puesto como un marrano. 

Se le va en comer y dormir,

ella no se da a la pena

no conoce de sufrir,

mas ya todos le dijimos 

que se ponga a dieta

pero sus sentimientos herimos

y no queda nada contenta,

pareciera que comiera más,

y de su plato de comida 

no se aparta ella jamás.

Se termina su porción 

y nuevamente se forma,

por eso su cuerpo transforma

al comer doble ración.

La llevaré a correr

en las canchas o en el parque

haber si se le olvida comer

porque está empaque y empaque.

 

(De Clear Eyes)