orlando guevara

Hervoroso corazón

Ahora dónde estas?, dónde a quedado la gloria

a dónde ha viajado aquel brillo de tus ojos,

si en los lejanos recuerdos intento

y  renovar tu encuentro, no está cerca

me cuesta murmurar conmigo mismo

el hirviente corazón que se desangra...

Ya no queda tiempo

insistir en sentimientos inéditos me apena

y no me alcanza la vergüenza 

para mantener en secreto

la duplicidad que me carcome...

Pueda que sean volubles de ahora mis pensamientos

que afloren el destino, convirtiéndolo en pasajero

raigambre divino que las hadas traen consigo

apuradas por el viento

en busqueda de filtrear 

los espacios que los corazones vacíos desconocen...

Desvivir de tales vicisitudes me corrompe

permanecer sin regresiones

que me adviertan del cometido error.

Quédate y abandona el alma que persigues

no puedes ser su única dueña

ni siquiera la remota coincidencia

del reencuentro de dos seres que se quieren

pueda atar al espíritu disidente

y esplendor a causa de sus placeres...