julio de guernica

Big ban

Vestida de otoño, besada de luna,

te acercas temblando de amor a mis brazos;

sonríe en tus ojos un fulgor de estrellas,

y un beso escondido te alumbra los labios.

Tu perfume a gloria me hipnotiza el alma,

se me quema el pecho, al tocar tus manos;

en  cada intersticio de tu piel dorada,

las rutas del cielo recorro despacio :

Tus ojos, tu pelo, tu cuello, tus hombros,

tus senos perfectos y tu vientre llano,

tu ombligo, tu espalda, la piel de tus glúteos,

tus piernas de diosa, y tus pies descalzos,

uno a uno sienten mis caricias nuevas,

y el fuego que se hace hoguera en mis labios;

me hierve la sangre al entrar en tu cuerpo,

donde quiero siempre vivir atrapado,

anclar firmemente mi barca en tu puerto,

y en tus atolones morir encallado…

Contemplo una lluvia de estrellas fugaces,

que muestran que el cielo, de pronto ha estallado,

escucho campanas repicando a gloria,

y aparecen nuevos universos creados;

el sol se ha encendido, aunque es medianoche,

la luna su plata a tus pies ha bajado,

piso los umbrales del jardín del cielo,

y siento que el dedo de Dios me ha tocado…

Tu piel agotada traspira perfumes

de esencias sublimes y sabores mágicos;

todavía tiembla mi amor en tu seno,

mientras acurrucas tu sien en mis brazos…

Ya abrirán mis besos, el sol de tus ojos,

volverá mi boca a morderte los labios,

hasta que me ahogue, beberé tu aliento,

para despertarte y volver a amarnos…