Murialdo Chicaiza

IRREVERENCIA

 

Ya es hora de lanzar

las piedras contra los vitrales

quitarles a las palabras

ese hálito sacrosanto y la niebla

que disparen los pájaros

que crezcan los enanos

ya es hora de pintar de rojo

el cielo azul de los ángeles imaginados

de garabatear las paredes

con frases depredadoras

con adjetivos reveladores

es hora de desnudarnos

mostrar las supuestas vergüenzas

y las desvergüenzas reales

es hora de señalar con el dedo

de oprimir la llaga

para que salte el pus

hacia la paz de las flores

que el Mediterráneo regurgite

los migrantes ahogados

y a cambio de eso

atrape a los colonialistas ingleses

o franceses, o de cualquier nacionalidad

que las mañanas sean claras

que la luz sea pura

que el rocío nos ame y nos transfigure

ya no  hay tiempo para mutismos

que los eufemismos se esfumen

que la muerte nos abrace con alegría

sabiendo que algo valió la pena

que los dioses sean descubiertos

que los misterios se vistan de certezas

que el amor, por fin,nos contamine la carne.