yolo

Mi vida en mis manos

Niños sin alma cuyos ojos no puedo ni quiero recordar;

poco a poco su luz se pierde al ahogarla entre tanto humo.

¿La mía también agoniza?

Dicen que el aura se transforma al compartir calor

¿Llegaré a ser completamente distinta?

 

El cuerpo temblando, miedo rondando,

conciencia dormida y remordimiento nulo.

Debo perfumarme para no perder mi olor, sé dónde lo dejé,

jamás lo trataré de recuperar.

 

Uno, dos, tres, música siempre invade mi mente,

me acosa en los lugares y tiempos menos esperados,

cada vez más compleja sin dejarme descansar.

 

Ya no he soñado y no amo dormir,

quisiera muchas cosas pero me conozco bien, no son para mí,

requiero libertad, el aire en mis manos, jugando con mi cabello, limpiando las tristezas y salvándome del olor ajeno.

 

Mi vida en mis manos, mi esencia esparcida