Araceli Vellber

Todavía.

 

Todavía tenía, la oportunidad,

de quedarme sentado,

en el escaloncito, de la vida.

Con vistas, al sol del mediodía,

y el aire fresco tardío.

Todavía puedo,

tener mis labios,                        

Sentaditos, en los tuyos,

jugando, como si fuera una mecedora,

todavía mis manos,

juegan, con las tuyas,

se apoyan, en las tuyas,

como las ramas, que brotan del tronco de la vida.

Todavía pienso,

que estás sola,

sentada, en tu sofá violeta,

sumando poemas, llevando la cuenta.

Huelo tu perfume,

huelo el perfume, de tu ausencia,

es todavía, más intenso,

como el silencio, que habita, en los escaloncitos de la vida.

Dicen que la vida,

da muchas vueltas,

con las vueltas, que yo he dado sobre ti,

Todavía, tengo que esperar, las vueltas de la vida.