Josefina 46

LAS TRES NIÑAS DE ALCÁCER

Una noche a la luz de la luna

quise escribir unos versos

que hablaran de amor y ternuras

pero el recuerdo de unos hechos

me llenaron de amargura.

 

Aquel fatídico trece de noviembre

que los españoles jamás olvidaremos,

se encontraron brutalmente asesinadas

a Míriam, Toñi y Desiré.

 

Después de cuatro largos años

se inicia el juicio contra el único acusado

y desgraciadamente tenemos que admitir

que como al principio nos encontramos.

 

Se dice que el principal sospechoso

se encuentra huído de la justicia

y Miguel Ricard, presunto implicado,

pudiera ser el único condenado.

 

¡Y los criminales andan sueltos

\"matando a nuestras hijas\"

mientras se pierde el tiempo

en el Palacio de Justicia!

 

Un padre con más tenacidad

no lo hemos visto en la vida,

en busca de los asesinos

aunque le cueste la vida.

 

Valiente, sereno y en ocasiones

esbozando una sonrisa

conteniendo la ira que supone

presenciar tanta injusticia.

 

¡Luche sin desmayo

don Fernando García,

por la carne de su carne,

por aquellas inocentes niñas!

 

Para que se aclaren los hechos

¡aunque nadie le devolverá a su hija!,

pero nos quedará a todos el consuelo

de que por fin se hizo justicia.

 

Abogados, Fiscales, Jueces,

Magistrados de la audiencia,

hacer prevalecer la verdad,

la justicia y la decencia.

 

A los padres, hermanos,

abuelos y pueblo de Alcácer,

España entera se une a vuestro dolor

en esta larga y dura contienda.

 

Y en esta noche de luna llena

alzando al cielo la mirada

doy por terminado el poema

implorando a la justicia Divina,

la única que existe en la tierra.

 

Fina