Eres tú, mi agua pura y cristalina,
de pronto beberé ese amor helecho,
que nace como flor bajo la encina;
mes das calor, mantienes en mi pecho
ésta fe antes perdida, eres mi bina,
la nueva siembra que ahora cosecho.
En abril nació el loco y bello idilio,
gracias..., contigo amor me reconcilio.
Un beso y una flor.
Alfredo Daniel López.