Cuantos recuerdos se esconden detrás de mí ser,
Seis décadas viviendo entre tensiones nerviosas,
Ya que nunca he siso seguro, en todo mi haber
¡Dios mío! Si pudiese volver atrás, sin más…
Años que soporta mi esqueleto y cerebelo,
Días y noches de escondidas, por miedo a vivir
Por esto en mis trabajos fui fiel, a mi desvelo
Siempre intentando que subsistiera, a mí existir…
Quien me iba a decir que llegaría, a sesenta y dos años
Y aquí sigo en la cúspide de mi aliento y pensares,
Mi vida ha sido muy dura, porque no quería daños
Esas vivencias colaterales que, surcaron los mares…
Allá por mis dieciocho meses, de mi servicio militar,
Una etapa muy dura llena de llantos y algunas sonrisas
Jamás había salido de Murcia y esto agobio mi pensar,
Con miedos inmensos, en tierra y altamar, con sus brisas…
Durmiendo en literas,, en maniobras militares insoportables
Aquello paso, pero fue cuando empecé a escribir poemas,
No sé si escribo bien o mal, pero mis sentidos son imparables, Por lo que doy gracias al Señor, dentro de todos mis problemas.
¡No se parar, hay algo extraño que me empuja a escribir líneas, de torturas y alegrías sin más!
Modesto Ruiz Martínez / jueves, 24 de abril de 2015