Que todos los poemas que le he dedicado los lee, aun sin saber que son para ella.
Que cuando muere de frío desea tener unos brazos cerca, y es una pena que no piense en los míos.
Ella, ella me quiere...
Tal vez este ocupada cuando le digo que le amo, y sea su cansancio quien le impida decirme que también me ama.
Tal vez los gritos de amor que salen de mi alma, no logren penetrar su frío silencio.
Tal vez sea el tiempo, la miles de horas que nos separan, las noches de trabajo, el afán de su espíritu o cualquier otra cosa que se me escapa decir, la que impide demostrarme sus sentimientos.
Yo sé que ella me quiere, pero lo que más tengo claro, es que jamás podrá quererme como yo le quiero.