Entre mis dedos,
una melodía placentera que abandona mi ser,
un suspiro tenue que se enreda entre mi cabello,
una mirada al infinito que desprende miedo.
Distraído de un futuro cercano, me encuentro divagando entre mis pensamientos...
Un sin fin de palabras, de canciones,
de recuerdos, que se apoderan de mi vida,
que me llevan a un maldito mundo de tristeza y destrucción,
como un vicio eterno de nunca acabar...
Se recrean en mi los mas imbéciles pensamientos,
como un morbo constante de sufrimiento,
que no detiene,
que no se acaba...
Un océano de soledad que abraza mis sentidos,
que ahoga mis momentos,
un océano de soledad que inunda mi vida y no encuentra por donde correr...
Y completo con una canción, la pieza que me falta,
cubro con un azulejo el agujero que algún día nunca estuvo,
y hoy se ha vuelto la perdición interminable de,
de mi.
Un océano de soledad que nadie conoce,
un océano de soledad al que muchos le temen,
un océano de soledad,
que inundó mi propiedad para oscurecer la única estrella que habitaba,
mi ser.
Las razones no existen,
se que estoy en un lugar donde pocos han estado,
encontrando las razones para continuar,
y hasta ahora no hay ninguna...
Entre mis dedos,
una canción solitaria que compaña mi ser,
un suspiro infinito que se anida dentro de mi pecho,
una mirada al infinito que me da miedo.