Cheilys Vega

Amante mía.

Anda, quédate aquí conmigo, la chimenea está encendida y no es conveniente que te marches esta noche.

Anda, no tengas miedo, la luna está llena e ilumina toda la sala, por si temes a la oscuridad.

Vamos, entra ya, entra melancolía, y hagamos que el papel sea el único testigo de nuestro pacto.