Ramón Bonachí

OCTAVAS A UNA IMAGEN

Despierto con el sol justo a mi lado
y me entrego a la brisa sin pereza,
soy libre, y sobre un mar casi pintado
disfruto de los pies a la cabeza.
De todo lo real o lo soñado
soy el dueño; me elevo con firmeza
y vuelo, qué mas da la dirección,
como siempre decide el corazón.



Allá voy con los brazos extendidos
buscando mis caminos al azar,
las nubes , algodones suspendidos,
me quieren en silencio acompañar.
Observo cada día,coloridos
paisajes que me suelen refugiar,
solo me preocupo del presente,
¿mañana? , será igual seguramente.