Raúl Daniel

QUÉDATE (ESPEJO 160)

 

¡Oh, soledad!, ¿qué más castiga,

tú, o una mala compañía...?

Quédate un rato más que tengo miedo,

quédate un rato más, amiga mía.

 

En mi jardín muere una rosa,

agua le falta, sol y caricias...

la primavera ya se ha pasado,

(la primavera... y la sonrisa).

 

Tal vez, de lejos, alguien me mire,

tal vez mi rosa aún tenga aromas;

pero yo tiemblo si alguien toca

mis cicatrices...

 

¡Oh, soledad!, ¿sabes?, te invito

a que camines conmigo otro día;

quédate un rato más que tengo miedo,

quédate para siempre, ¡amiga mía!