Beatriz Blanca

EL RELOJ

El reloj indiferente avanza

y andando con el tiempo alcanza

las ansias que bailan su danza.

 

Agazapado y sombìo

con un temblor frìo

el reloj muestra su brìo.

 

Perdida en la penumbra oscura

percibo un tic tac, que murmura

ofreciendo su delirio en la espesura.

 

Susùrrale al inconsciente

con suave voz indolente,

¡estàs viva como un torrente!.

 

No respiro y quiero sentir su ardor certero

despertar del letargo quiero

para encontrarle sentido al mundo entero.