Mi tierra ya no es la misma, pues ya se acaba, de Cuenca su alacena,
su pantagruélico valle, que a manos llenas sus frutos repartía,
su casto cuerpo, con engañifas, en mil pedazos es repartido,
en sus prados, colinas y valles, invade el cemento, cal y arena,
mi tierra agoniza, por las heridas que recibe día tras día
dessangrándoce por los lados de su cuerpo, vilmente desmembrado.
Del Molle su cascada de agua desnuda que, con urgencia bajaba
bañando los pequeños Mirtos (*)verdes de Apangóra, su verde umbría
en donde los niños, en noches de luna quemábamos Achupíllas,
era mi río transparente, que, entre los sauces alegre cantaba
arrullando a mi pueblo, que, con la magia de su ritmo se adormía,
hoy proliferan; carcelarios muros, cercos, portónes y murallas.
Calusarín, tus añejos nogales, testigos de tiempos de gloria
que, ya por designio, o fortuito accidente poblaron tu fértil suelo.
El hacha embustera les pidió su mango y, muy generosos les diste
y, de un solo tajo cegaron vuestras vidas, y vuestra bella historia.
Hoy, ya de entorno diferente, hay nueva gente, y con diferente anhelo,
pero el mundo no para, y, el progreso cambia todo cuanto aquí existe.
Nulty, como te recuerdo, si en tu chorro lavé, de mis pies el lodo,
yo bebí tu agua cristalina que de tus entrañas, fresca brotaba.
Fontana de vida, y, sostén de todo cuanto en tu entorno se movía,
a alguien se le antojó cerrar tu grifo, pretendiendo saberlo todo
y, sellaron todos tus vertientes como si nada de eso importaba
hoy te desintegras, te hundes, asediáda por el lodo, que Ironía.
Oh! mi valle de \"CHALLUABAMBA\", precioso paraíso terrenal
que arrullado por el río \"Tomebamba\" te adormías con sus cantos,
mágico manto tejido con enjambres de jazmines y amapolas.
\"Ser o no ser\", es tu dilema al ver truncado tu intangible ideal
vas entrando aceleradamente en la ruta de los quebrantos,
mustia, cercenada, víctima del consumismo pereciendo a solas.
Tus vigías, cerros, el Molle y el Plateado, salvarte no pueden,
con la fuerza de \"la Retro\" que con su indómito furor la embiste
y, sin piedad tus costados abre, en aras del progreso despiadado.
Sin embargo, tus hijos y los hijos de tus hijos, que aquí se queden
lucharán por tu integridad y por la paz que en tu suelo conociste.;
* arrayán,planta arbustiva de la familia de las mirtáceas.
Autor: Mário E. Cabrera Aguilar. (mariocab) mayo 27/2012.
Poema publicado en el diario el Mercurio de Cuenca el domingo
7 de abril de 2013. pg. 3-B. Artes y Letras.