Marlene E. M.

Eres...

Eres luz fulgurante entre las tinieblas,
eres belleza radiante en un mundo imperfecto,
el esperado amanecer en una noche interminable;
eres el cielo inalcanzable que anhelante contemplo.
Eres lo que impregna de hermosura la vida misma,
dulzura y divinidad que envuelve todo a su alrededor;
la magnificencia que embellece el engranaje de la eternidad.
Eres la llama incesante que aviva el más gélido y oscuro rincón,
la estrella que alumbra el telón nocturno en la inmensidad.
Eres el sueño sublime que es más poderoso que la realidad,
la profusión de emociones que encienden mi interior,
eres la eterna ilusión de un corazón rebosante de amor.