¿Me permites estar contigo, mi amor?
Esta noche hace frío y odio alrededor.
Prometo mis manos serán seda persa,
harán de magia pura en tu piel tersa.
Te sientes insegura que yo sea distinto,
no pienses eso porque aún soy el mismo.
Muchas veces creiste que ya te olvidaba
luego entendías lo cuanto te recordaba.
Sé demasiado difícil es el tenerme cerca,
más sería si mi alma fuera muy terca
pero esta persistencia no es algo banal
sino un corazón vivo de modo capital.
Ahora que estoy a tu lado mi calor arde,
mi mente se pregunta como es besarte,
cada parte de mi cuerpo quiere tocarte;
me decido y lo hago antes que sea tarde.
¿Cómo pude obviar esta cara de la vida?
Tanto buscar y eras mi vista preferida.
Profundo lo que se siente al explorarte.
Un artista haría, con tu existir, su arte.
¿Sábes una cosa? Ya no te voy a dejar.
Alma, corazón y vida a ti voy entregar.
Me ayudó respirar tu aire una vez más.
Mi amor, de tu puerto, no partirá jamás.