el poeta del abismo

hoy se cayĆ³ una hoja con tu nombre

Me ardió el corazón absorto al recordarte 

 

Le mentiste al tiempo con que estarías y no estuviste 

En altas montañas te vieron, cielo bajo de colinas

Y la montaña más alta se esconde allá arriba 

Resguardando secretos, no los miro

 

La palabra invisible apenas pudo con el comarca

Ese silencio omnipotente de los rincones de madera

De la piel donde no se toca 

Y cuesta nada si malamente bien vengas 

Soñé abrazándote y te fuiste a tu despertar 

A tu amanecer en aquella cama 

¿no recuerdas qué estuviste conmigo?

Te amé sin sonar en mi sueño

 

¿alcanzó a caso algo esa hoja cayéndose?

¿Vendrás a quererme cuando alguien te rechace, 

Y quieras que la vida te sea justa?

A tan solo escuchar de mí, otra vez,

(Cuando la mano suba algo hasta tu boca

Y solo el papel blanco, si el papel blanco 

Sepa que no puedo con la blancura de tus pechos

Y me des de ellos solo la punta negra

Sabrás que yo en ti amo hasta la negrura.

¿vendrás a eso? Mejor no vengas, yo iré.

 

Arañando tu cabello, ahí se fueron mis sueños

En tu melena.

Te caíste hoy al suelo tan adufe.

¡cuantas veces el cielo

Llora, toca y besa la tierra

Y no puede estar con ella,

Vaya amor amurallado!

 

Yo no viví los años

Ellos vinieron a vivir en mí

 

Comí de tus besos y me creció el hambre

¿a qué vienes de nuevo por mis besos,

Besando el recuerdo, a que me crezca el hambre?

 

Hoy se cayó una hoja con tu nombre

Has besado ya otras tierras