alicia perez hernandez

Madrugamos al amor… jueves de amor

Madrugamos al amor… jueves de amor

 

Fuimos quimeras sin bardas altas…

dejamos descubiertos nuestros cuerpos

y los cuervos quisieron hacer banquete,

más el amor se ungió de besos,

el bálsamo alimentó las bocas,

y los cuervos quedaron desplumados.

Sostuvimos con el alma éste amor

madrugamos en tiempos idos,

para no hacer escarnio del amor,

dejamos bajo sábanas el nido,

con promesa de amarnos eternamente.

Por eso cuál pichón regreso siempre

dando calor con mis versos al nido,

que los dos construimos con amor,

al amparo del perdón y del olvido

de quejas y de celos bien tejidos,

amasamos como pan cada herida

perdonada a tiempo.

Sumergimos el alma en cada beso

y mordimos los labios lisonjeros,

para amarnos sin tiempo y sin espacio,

dejando qué los cuervos sólos se picaran

hasta quedar muertos de envidia,

al ver que nuestra piel se unía

cada noche, para amarnos.

Jamás abandonaré el nido,

que nos costó la vida construir,

no permitiré sea destruido

mi amor lo cubrirá por los dos.

 

Alicia Pérez Hernández… México

-No es la pluma la que escribe es el alma-.

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