pilar gorricho

Árboles

La mentira de la sabiduría

levanta las persianas del miedo.

Viajar a la tierra de los árboles

yo quisiera.

Poder contar sus horas de penumbra

o sus ciclos vitales de irrisoria desnudez.

Esa manera que tienen de ver

pasar la vida.

desde el campanario de lo imprevisto

o desde el gris de su enferma rama.

.

El modo en que son vojeuars de amantes

o dan la espalda al cuchillo.

Su eterna sed,

y su aversión a las hojas

cuando dejan de cumplir

su primitiva misión.

-Que de nada sirve dar sombra

a quien no ha visto nunca la luz-

Viajar a la tierra de los árboles

yo quisiera.

Y no saber quien me ha plantado,

de que sangre bebieron los frutos

de mis raíces,

o que poeta embriagará su ego

con mi fuste.

Pasar por esta vida sin saber

cuando la corteza será cicatriz.

Amar la incertidumbre de la pregunta

sin temer la evidencia de la respuesta.

Solo permanecer erguido y saberse

único e irrepetible en ese espacio y tiempo.

Amigo de las ardillas, y los excelsos

viajeros del tiempo.

Enemigo de la endémica peste

carcomiendo los anhelos.

Viajar a la tierra de los árboles

yo quisiera.

Y ser,

vientre de futuro artesano

estirpe de golondrinas,

marisma de rocío

sosiego del caminante

hijo del sol y del arroyo.

 

Con el soplo de su savia

sin la evidencia de lo oscuro,

su presencia es sacramento

del ser, del estar,

en la directriz de lo azul.

No sabe, no puede saber,

que será talado un día de estos.

-Quien solo persigue existir

no se preocupa de cómo vivir-

 

P.Gorricho.