Agustin Caicedo

Un pedazo de aquel mundo

Los humanos vivimos tristes porque no esperamos

La tierra se mueve y el cielo se transforma

Tenemos el afán de seguirlo, de alcanzarlo.

Mas no nos damos cuenta

Que aun sentados en una banca

El espíritu viaja y las personas pasan.

No somos especiales

Solo somos un pedazo de aquel mundo que se nos dio

Solo somos un fragmento de una gran historia.

Lo bello de ver al cielo pasar

Es sentirnos felices, despiertos

Realizarnos que hacemos parte

De un gran mismo mundo

De un muy vasto cielo.