No escucharás, ni sentirás,
no contestarás, ni mirarás,
pero es un lugar donde no cumplo condena,
aunque no canten las sirenas,
aunque mil nubes oculten la luna llena,
me llena escribir escuchando,
letras como de un poemario van brotando,
describen la imagen y así fué como estuvo pasando,
pensando, donde me quede un ratito para recapacitar,
casi guardo mil noches en vela,
solamente me quedaba esperar,
que llegara la primavera... pero no acababa de llegar...
si allí me puse a pensar, con mi imaginación fugaz,
no le quise hacer caso al dolor,
orbitando a mi alrededor,
no fuí capaz de ver una absurda realidad entre dos,
ni de escuchar vientos del norte helados,
por un momento se fueron los llantos,
esperanza falsa de almas negras,
por hacerle caso a mi alma,
que se piensa que somos gemelas...
yo no le podía contestar a esa cuestión,
que no le encuentro solución,
con pasión le diría,
que llevas su mitad, una mitad que sigue siendo mía,
siento mucho si mi realidad es la que desvaría...
un día me hiciste volar... de eso no me olvidaría...
me hiciste rozar la libertad,
me enseñaste que en esta vida hay una gran verdad,
cada uno tiene sus teorías de esta realidad...
yo me quedo con la mía,
qué mas da si es oscura y sombría,
me hizo despertar del sueño que tenía,
me hizo ver con otros ojos el despertar,
despejar mis miedos a volver a andar,
a vivir lo nunca vivido y que es tan especial,
demasiado original, si no es casual,
llego a los límites de lo irracional,
tu mente es prodigiosa, fuera de lo habitual,
me lo haces sentir en cada verso, en cada prosa,
mi alma dice que eres especial,
muchas veces me exige un por qué lo has hecho mal,
no puedo contestarle... así es la vida de cristal,
y en este rincón de mi mundo ,
puedo huir, buscarte en la soledad de mi yo más profundo,
así hallo la paz por minutos de estar un poco más juntos,
distanciados si...pero las almas tienen otros asuntos,
sentirte en cada mirada, en cada huella pisada,
en cada estrella regalada, por una tierra sagrada,
por la más bella de las novias que el mar espera,
porque mi alma allí no se siente abandonada,
te espero como siempre ángel del sol negro en la madrugada,
hasta que vea que sale tú sol,
entonces me dormiré esperando una canción,
la guardaré bajo la almohada pues te quiere soñar mi corazón...