Daniel Cifo

Una mirada tuya,

incandescencia, 

de destellos de cegadora luz

en cada porción de mi pupila.

 

El roce de tu pelo,

cristalización,

de una lluvia de estrellas de oro

tornadas en virutas de seda.

 

La magia de tu piel,

vaporización,

al paso de tus pétalos de rosa

sobre las espinas de mi corazón.