Franklin Sandi

Ella y yo un amanecer

 

Cinco de la mañana.

 

Un pájaro aprendiz

picotea

la última sombra

 

y pía.

 

El aire

frío

contiene la respiración

y espera.

 

Un auto trasnochador

sigiloso

rueda

bañado en luz de farol.

 

Ella

 

todavía flota

en el mundo astral

con pequeños sobresaltos.

 

Yo dormí bien.

No tuve sueños extraños.