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A TRAVÉS DE LA NOCHE Y LOS ENIGMAS

 

A TRAVES DE LA NOCHE Y LOS ENIGMAS

 

Uno  puede soñar inocencias y desastres

rostros desfigurados danzando

                                             en la pupila

imágenes confusas en un lienzo

                                   que la brisa asola

Uno puede despertar sobresaltado

y sentir el embate del agua

                     que inunda las arterias

la increíble nave de la noche

que tiende su red de horóscopos

                                            y anhelos

Uno puede quedarse en el ombligo

                                            de la infancia

atado al bullicio ancestral de un banco

que reaparece a cada instante en la memoria

Uno digamos también puede ser el miserable

el vagabundo  el loco que danza

                                             en los aleros

mientras la noche quiebra su manzana

y un borracho riega las calles a intervalos

Uno puede llegar desde otro sitio

donde el humo y la risa 

                                       la lluvia y el llanto

pintan y deshacen rostros y recuerdos

 

Extrañamente somos peregrinos

enemigos antiguos de la soledad

reacios a símbolos y golpes de fortuna

Uno puede viajar hacia la desmemoria

a capa y espada hacia el fondo del tiempo

donde no solo el polvo nos sorprende

Uno puede oscurecer al mediodía

cuando toda la sombra se reúne  

y el sol se transparenta en las colinas

 

Uno puede abandonar el rostro

                                en una vieja calle

mientras la nieve ahoga las estatuas

uno puede parecerse al hombre

y comprender que el primer hombre

tuvo lástima del último mono y viceversa

 

Uno puede caerle a tiros a la soledad

maldecir el sueño y la hipertensión

las absurdas ganas de hacer el amor

                                         con cada chica

Uno puede tocar a la puerta de una casa

y esperar a que un rostro atraviese

                                                     los cristales

a pesar de que a veces escasean los sueños

y  pesan demasiado los años y la ausencia

 

Uno puede volver sin un centavo

con medio litro de alcohol en la cabeza

con el humo danzando entre los ojos

y una sonrisa mueca

y una mirada triste

pero siempre

a través de la noche y los enigmas

a través de los rostros que jamás

                                llegaremos a conocer

uno puede sonreír a la vida

aún sabiendo    que sólo la muerte

                                            nos    espera.