Manuel Palacios

MANOS TRAVIESAS.

 

Mis manos traviesas hurgan tu ardiente piel

en la búsqueda de tus ansiados rincones,

donde bajo el estímulo de mis dedos

brotan tus deliciosos jugos de mujer,

y ahogando sutil gemido

mis manos continúan bellos caminos,

con verdadera ansiedad

buscando tu punto de oro

que como el anhelado tesoro,

se entrega a mi voluntad.

 

Te estremeces de emoción

cuando recorro tan bello cuerpo,

que al recibir mis caricias de pasión

en tan ansiado puerto.

Te siento desmayar, que al borde de la locura

me hablas con sensible ternura

para tu amor entregar.

 

Manuel Palacios.