Ninfa de cristal 🧚

Lunes de alegría

Quieres la luna…es tuya.

La princesa enamorada, estaba muy triste por su amor que no le correspondía, pues a pesar de que ella le daba su amor sin límites el vacilaba en entregarse por completo, y así fue pasando el tiempo, ella cada vez más enamorada y el más indiferente.

Un buen día, el príncipe invito a la princesa a su castillo y le dirigió unas palabras que la conmovieron por completo, ella no podía creerlo, pues llevaba mucho tiempo esperando oír algo parecido y al escucharlas ahora, era tanta su emoción que no podía creerlo: - Pídeme la luna para ir por ella…

Ella boquiabierta no sabía que decir, pero el insistía: - pídeme la luna y te la bajare…

La hermosa princesa no sabía que decir, pero le correspondía con un beso. En eso el príncipe se dirige hacia la azotea del castillo y baja a su mascota, una linda perrita pastor australiano de nombre “Luna” y la coloca en las manos de la princesa. Fue así como por fin el príncipe le bajó la luna a su bella enamorada.

Fin.