la negra rodriguez

CRUZADA EN DEFENSA DELA VIDA

Hemos hablado del  problema del aborto, abriendo la posibilidad de que los lectores viertan sus  opiniones y  s su conceptos, pero, debemos tener en cuenta algo muy importante:

Que garantías  se les ofrecen a las  mujeres que   están embarazadas fuera io dentro del matrimonio. Cuando la sociedad aún n o logra vencer el problema del hambre, de la educación, de la salud.

Es fácil, decir: “abortar es un delito o un pecado”, pero debemos preguntarnos: ¿Qué  ahremops para  garantizar que esos niños  no terminen en  la calle de mendigos,  de  delincuentes  sin nin guna posibilidad  de un buen vivir? ¿Qué se  les ofrece a  las madres,  si muchas veces por estar embarazadas  son arrojadas de las instituciones educativas por ser  “un mal ejemplo”, si muchas  veces son  arrojadas de sus casas, si muchas veces son arrojadas de sus empleos. Entonces no  estamos en la calidad moral de  criticar  sino de  actuar. Y surge la interrogante. ¿Qué   estamos dispuestos a hacer para que esto no suceda? ¿Qué mundo ofrecemos a los  futuros  niños?

Un m al engendra otro mal y todo es una cadena o un círculo vicioso del  cual no se puede escapar y los que pueden  romperlo se encierran en la burbuja del comodismo o quemeimportismo.

¿Qué estamos dispuestos a hacer para romper ese  círculo?