debildemente

VIDA RETIRADA

A veces nos miramos.
Es tan grande la impresión que no hay tiempo para el recuerdo.
Así sin admitir. En un mar de anónimos,
Cuando el 7 es más que el 345
No sabemos descifrar que se busca.
Nos Quejamos sin reclamar.
En gotas leves
Pero volvemos a mirarnos. Igual a veces.
Solo en sueños, solo en un mar de anónimos.
La alegría se vuelve precaria.
El mar: cielo.
Y la noche tenebrosa a escala de grises.
Tú prosigues tu camino, yo hago mi vida.
Nunca nos presentaron, pero como nos conocimos.
Una leve resignación que se esconde bajo las yagas del matrimonio.
Pero al ver el mar…
La alegría se vuelve precaria.
Vuelve la noche a escala de grises.
Y consigo el verano con sabor a duraznos.