Hoy he salido de mi mundo,
me he quedado a tu lado a recorrer tu mente,
me he deleitado con tus lagrimas, y las he probado como vino dulce...
Me he dispuesto como peatón impaciente de lo que sucede a mi alrededor,
he atravezado la ceguera de tu alma con la inutil existencia de no poderte amar,
hoy simplemte te puedo decir, ya cuando he desaparecido en mi cuarto de madera,
con olvidos de tiempo, con pálidos colores...
Y tú qué me vez?
Autor: Principe Advenis