Luis Nunez

La Vida

Se me acercó con un abrazo

me explico sin preguntar

agradecida clavo su mirada

en mis ojos

 

Conversamos sus penas

cuantos insultos, maltratos,

golpes, cicatrices

y sin embargo era bella,

dulce, acogedora, fraterna,

apasionada

 

Me cautivo

y mi alma  no cabía en si de emoción,

alegría, felicidad.

Lagrimas caían en mi sonrisa

 

Caminamos tranquilos, placidos

Cruzamos luces, sombras

Callejones, avenidas

 

Me decía mientras me miraba con su infinita

dulce mirada

Es verdad me doy, me entrego toda a todos,

por amor y solo por amor

 

Yo la abrace con todas mis fuerzas,

amada mía  por fin te entiendo.

Y me deje guiar por una dulce luz

a mi muerte.