La Pluma y Mi Alma
(Autor y Cronista)
Oh mujer, que tan bella que eres
cual doncella de los bosques
de las vírgenes selvas del Lacandón,
si tan cerca de ti estuviera,
yo lucharía por llenar tu CORAZÓN.
Nunca muera el alma de la mujer que me gusta,
sea eterna la belleza que yo quiera,
quiera en mi CORAZÓN tener y hacerla mi mujer.
Que de tu fuente que en tus labios brota
cual sabor que me provoca
y al sentir tus peras cual fueran
como campanas de la catedral de mi pueblo
que cuando se te mueven me llaman
cual pechos de los cuales hablo.
Si cual barco en navegación por el mar,
cual a tu cuerpo comparo,
dejar con permiso poder navegar,
seguiría en mi viaje hasta llegar
al puerto cual faro encendido
me diera señal para llegar.
¿Puedo dejar las campanas
y seguir al puerto que tu faro
encendido me indique llegar?
La noche está con la luna de un cielo azul,
Se ve la luna como faro encendido que me
Indica a donde poder llegar.
Y como dos delfines, encantados
Al son de reales peces aprendemos
A navegar en pasión de amor por
Debajo de las profundas aguas del mar.
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Desde el Corazón del Alma del Poeta
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