monique ele

Catedral-viva

Y vamos a pensarnos

como esos dos

que nunca diremos.

En el espacio

y tiempo correcto

-la línea histórica

de nuestro lado-

la catedral-viva:

nuestra memoria.

Al centro:

la madrugada

cuando perdimos 

la cabeza;

y encontramos 

el corazón.