Cronistaebrio

Mujer fantasma

 

Lo siento pero ya no siento,

que triste es no estar triste,

en el sueño yace una gran frase 

siempre olvidada,

pero no se puede escribir un poema de 

amor,

sin estar enamorado,

estuvo como todas solo un momento,

y despues nada.


Tenias razón viejo amigo

con tan corta edad brindas grandes consejos,

no te enamores de una puta decías,

no te enamores de una mujer fantasma,

yo también agregaría,

cuando los consejos sepan a cerveza,

comenzare a tomarlos.

 

Estoy casado con la soledad,

esa que no abandona pronto como la carne,

la que es fiel como sombra,

la misma que queda cuando ya no queda  nada.

 

¿Seguiré siendo yo cuando ya no este?

Aunque ahora mismo sea poco menos que nada,

es el solitario un punto negro,

que entre la multitud de colores nunca destaca,

debí saberlo:la alegría dura poco 

menos que un parpadeo.