Francisco Gaitan Downs

…”SÚPLICAS DE UNA HIJA QUE NO QUIERE ALCOHOL”…

 

 

La niña está  triste
abrazada al  silencio,
con el recuerdo perdido 
de la felicidad que vivió.


Encerrada en su propio mundo
donde su sonrisa perdió,
sus alas le rompieron
y también su corazón.

La niña está triste, 
mi niña es infeliz,
le falta mi sonrisa diaria
para volver a vivir.