Raúl Daniel

En Mi Silencio...

En Mi Silencio...

 

Tus promesas de una vida juntos...

¿dónde están...?

¿Dónde estás por las noches, con tus besos,

en que me siento perdida en soledad...?

 

Yo estoy sintiendo en mi vientre esa vida

que es un pedazo que antes fuiste tú...

y te reclamo, no por mis derechos,

sino que siento que me muero de amor.

 

Me acostumbraste a tus raras caricias...

¡ningún hombre lo hace como tú!,

yo me entregué como una hoja a la brisa,

y ningún viento se puede retener.

 

Debes saber que quedé trastornada,

y ando todo el día sin saber qué hacer,

hasta que cae mi cabeza en la almohada

para mojarla, cada noche, otra vez.

 

A veces tomo esa prenda que empapamos

cuando lo hicimos por primera vez

(y en un lugar muy secreto la guardé),

y entre las manchas de mi sangre, en mi locura,

siento que huelo tu perfume, también.

 

Están además las cosas en que pienso

en los momentos en que más me dueles...

y es en dejarte... (¡pero tú ya me dejaste!

y sólo matándome lograría lo que quiero...)

 

Lo he pensado muchas veces y no puedo,

llevaría conmigo al que en mí está creciendo

(tal vez sea niño y su rostro te parezca...

y pueda verte en sus ojos todo el tiempo).

 

Yo no te pido que me cumplas tus promesas,

después de todo no se obliga un sentimiento...

y ya que no puedo amarte como quiero,

lo haré en mi llanto, en mi angustia y mi silencio.