Cesar Zamora

Presentimiento

Trémulo de emoción y sumido en llanto

mis manos vacías, al cielo eterno levanto

pidiéndole a Dios, que pare el tormento

que borre sus besos, de mi pensamiento…

 

Pues todo lo he dado, y ya yo no aguanto

sufrir esta pena, este hondo quebranto

en vano he tratado, por más que lo intento

arrancarme del alma, este sentimiento…

 

Que agobia mi vida, que me causa espanto

el ver que no me ama, y yo amándola tanto

como a nadie en el mundo, juro que no miento

la deseo, como al agua, el naufrago sediento…

 

La recuerdo siempre, con el mismo encanto

con la fe indemne, ustedes no saben cuanto

y mi esperanza intacta, hasta el último aliento

porque ella será mía, otra vez, lo presiento…

 

CAZA

24/04/2014