Para ir a tus brazos, a punto de correr estoy,
 cansado de esperar, hombre impaciente soy
 y temo que el tiempo vuelva a la espera vana.
 Aunque estoy seguro de lo real de mi querer,
 sé muy bien que así como supe amarte ayer,
 yo con todas mis fuerzas te amaré mañana.
 Para comerte a besos estoy a punto de correr,
 ya no habrá obstáculo que me pueda detener
 en mi decidida carrera persiguiendo tus pasos.
 Quiero que de nuestro sentir seamos dueños,
 que con mis besos puedas revivir tus sueños
 y yo vivir amándote en los tuyos, en tus brazos.
 Estoy a punto de correr y tendrá final mi carrera,
 cuando ya estando contigo me digas la manera
 en la que quieres que te ame, que te posea…
 Es hora de correr porque al fin ha llegado el día,
 vas a gritar mil veces en mis brazos que eres mía
 y no me tendrás que rogar para que te lo crea. 
 Estoy a punto de correr y vale la pena este apuro,
 he de amarte mujer con tantas ansias que auguro
 un final excitante como nunca para este encuentro.
 Deja que la humedad de tu cuerpo me la trague
 y arde feliz conmigo, no habrá nada que apague
 esa llama de pasión que te encenderé por dentro. 
 Es hermoso imaginar que desnuda por mí aguardas
 y que estás muy dispuesta a todo, ya no te acobardas
 y dejas que con libertad se encienda más y más tu llama.
 Brotará de tus labios sin que te des cuenta mi nombre
 y te veré emocionada, ansiosa, suspirando por el hombre
 que hoy está a punto de correr para decirte que te ama.
 Poema totalmente original de Álvaro Márquez
 Nacido en Caracas, Venezuela
 Todos los derechos reservados
 Publicado el 14/4/2014
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