LIZ ABRIL

SIN TI

Los días pasan constantes y sonantes

Como una gota de agua en la pileta de la cocina,

Resbalan lentos y monótonos

Y estoy metida aquí, ¡total no importa!

Si no estás y si no están tus manos

Como cadenas invisibles en torno a mi rostro

Para beberme, morderme, besarme y amarme…

Sorbo a sorbo.

Como si la vida pendiera de un hilo…

Arañando mi espalda para incrustarme en tus dedos,

Tan adherido a mi piel, a mis entrañas,

Tan agarrado para no caer.

No estás y me invade la rutina

Y la rutina mata la pasión.

Yo me dejo arrastrar loca y suicida,

Por una vida que me pasa por encima.

Las agujas giran contigo o sin ti.

La casa, los hijos, el trabajo

Y los problemas de todos los días.

La gente camina por la calle ignorando que no estás.

Y  no puedo correr hasta encontrarte.

Como un cuerpo gigante la ciudad

Late sin el ritmo de tus pasos.

No te cobijas a la sombra de algún árbol,

Ni estás sentado a la mesa de un café,

Ni avanzas por las calles con tu auto.

Ni el ascensor de tu casa ni tampoco la escalera

Aguantan el peso de tu cuerpo.

No estás y no puedo ir a buscarte

Para hacerte el amor mientras trabajas.

 Y la vida de verdad,

La que latía en nuestras manos entrelazadas,

En nuestros corazones apretados

Frente a frente,

En nuestras venas confundidas

En tus brazos y los míos…

Se fue contigo.

No era necesario decirte “ven, deja todo, te necesito”

Tú venías a mi cuando sabías

Que tu abrazo me rescataba de la angustia

Y hoy no hay peor castigo

Para todos los pecados cometidos

Que no tenerte a mi lado

Y estar aquí tan sola.

Porque ni la otra gente ni lo que hablen

Importa ni tiene sentido.

Porque después de lo que pasamos juntos

Es ridículo, absurdo, inexplicable

Estar tan lejos y que la vida pase

SIN TI.