Miguel Bockablos

Para futuros encuentros...

Entonces nos deseamos con fervor  

como se desea lo que no se tiene, 

pero con la sutileza que exigía el momento, 

éramos libres de hacer o deshacer mundos,  

levantar o destruir imperios, fundirnos en uno solo o  

devorarnos hasta quedarnos sin nada;  

pero decidimos reservarnos tal libertad  

para futuros encuentros...