jureme

en el ocaso

EN EL OCASO

 

 

 

Se enfrió mi cuerpo desnudo en el ocaso
marchitando  flores que había a mi lado
las cuales había a mi tálamo aromado
al darme en  fusión contigo en el abrazo

 

Abrazo que me diste sin ningún rechazo

Al unisonó con el  beso aquel inesperado

Donde al roce de tus labios fui impulsado

A desnudar tu seno, sin  hacerte caso

 

Razón por la cual te fuiste tras la tarde

Sin importar que al ocaso llegar seria

El más infeliz entre cualquier cobarde

 

Mas sabiendo  la noche me importuna

En esta te escondes para la pena mía

Aumentarla sin dar  explicación alguna