Dominatorque

Corazón de yunque

Así como el hierro a sus golpes

La herramienta tosca de mi pecho

No tañe sobre campanas,

Suena sorda como el yunque

 

Porque he cansado la aldaba honda de su vientre

Con el martillazo continuo de mis besos

Perseguido con mis dedos

El río que busca el manantial de su ombligo

Creí que su cuerpo era una playa

De caracolas cantándole al viento

Pensé que su pelo una bandera

De pétalos vivos recién nacidos

Yo pensé que su piel era el limo

De los caracoles tras la lluvia

La roca apartada de sus olas

 

Así como la tormenta se avisa

El trueno perpetuo de sus latidos

Al descansar mi cabeza, sobre su cuerpo

Y beber mi oído de sus entrañas

!Que dulce melodía!

 

!Que ruda herramienta!

Los hierros sordos de mi pecho