☼ G U E R R E R O ☼

LA FALTA DE SUJECIÓN PRODUCE MURMURACIÓN.

La no sujeción produce murmuración)

 

Propósito:

“Unidad en familia.

 

 

                                                    Introducción:

Existe una frase muy común que dice “que bonita familia” todos nosotros pertenecemos a una familia, independientemente de donde somos, todos tenemos una familia,

Familia sanguínea,

Familia en Cristo,

Familia laboral.

 

 

Pero sin duda no tenemos la familia perfecta, dentro de la familia sanguínea  existe la no sujeción, y con ello conflictos, desacuerdos, malos entendidos, envidias, vanidad, etc.…

 

En la familia en Cristo no es la excepción “lamentablemente” tenemos la no sujeción y produce “murmuración”

 

Y así mismo con nuestra familia laboral existe esa no sujeción y produce “murmuración”

 

 

Punto # 1

El problema es que nosotros mismos activamos ese virus sin darnos cuenta que regresamos al desierto, el mismo desierto que vivieron el pueblo de Israel, y para eso revisaremos la siguiente cita bíblica,

 Exo 15:24  Entonces el pueblo murmuró contra Moisés, y dijo: ¿Qué hemos de beber?

Exo 16:2  Y toda la congregación de los hijos de Israel murmuró contra Moisés y Aarón en el desierto;

Exo 17:3  Así que el pueblo tuvo allí sed, y murmuró contra Moisés, y dijo: ¿Por qué nos hiciste subir de Egipto para matarnos de sed a nosotros, a nuestros hijos y a nuestros ganados?

Num 16:41  El día siguiente, toda la congregación de los hijos de Israel murmuró contra Moisés y Aarón, diciendo: Vosotros habéis dado muerte al pueblo de Jehová.

 

Nosotros ya conocemos la paciencia que tuvo Dios con el pueblo de Israel,

Pero ¿por qué estamos haciendo nosotros lo mismo?

Lo que Dios quiere esta mañana es que seamos una familia Cristiana unida, este es el propósito de Dios hoy,

El pueblo murmuraba contra Moisés, hoy murmuramos en contra de nuestros pastores, hoy murmuramos contra nuestros hermanos, lideres, y este virus de la murmuración no nos conviene, pero desde hoy renunciaremos a ese virus, ¿amen?

Punto # 2

 Sabemos que el varón es la cabeza de la familia, ¿y porque existen problemas dentro la familia? Papá habla mal de mamá y mamá habla mal de papá, es esto un buen ejemplo para nuestros hijos ¿o para nosotros como hijos? ¿Qué dice la palabra de Dios acerca de esto?

 

Eph 5:28  Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama.

 

El marido que habla de su mujer habla de si mismo, habla de su cuerpo, la esposa que habla de su esposo habla de si misma, habla de su cabeza,

¿Entonces si hacemos esto cómo esperamos que nuestros hijos no lo hagan?

Si nosotros hacemos esto nuestros hijos harán esto mismo con sus respectivas parejas y no solo eso, hablaran de sus propios padres, ¿y dónde terminará esto? Y el virus continua, “murmuración”

 

Eph 6:4  Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos,(C) sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor.

 

Si nuestros hijos miran los maltratos que hacemos con nuestras respectivas parejas eso los provocara en ira,

 

Pero qué sentimos nosotros como hijos cuando vemos maltrato hacía nuestras madres ¿y porque no? por nuestros padres,

 

Y ahí nace algo que nos han estado enseñando amargura en nuestros corazones y todo esto nació por el virus de la “murmuración”

 

La murmuración destruye nuestras familias la sanguínea y la cristiana,

Y muchas beses vamos a un peligro mas grave “las redes sociales”

 

Esposos y esposas hablando de sus problemas en estas redes,

¿Cuales son las consecuencias?

Tanto la esposa como el esposo abren la puerta al adulterio, lo que hacen es decir soy un blanco fácil para que abusen de mi, porque solo eso pasará, se aprovecharan de la situación, pero lo mas grave avergonzamos a nuestros hijos y a nuestros padres,

 

Esta falta de sujeción produce murmuración y tiene consecuencias nefastas, destructoras y ofenden a Dios.

 

La no sujeción produce juicio de Dios.

 

¿Hasta cuándo oiré esta depravada multitud que murmura contra mí, las querellas de los hijos de Israel, que de mí se quejan?

Num 14:28  Diles: Vivo yo, dice Jehová, que según habéis hablado a mis oídos, así haré yo con vosotros.

Num 14:29  En este desierto caerán vuestros cuerpos;(F) todo el número de los que fueron contados de entre vosotros, de veinte años arriba, los cuales han murmurado contra mí.

 

Mat 25:40  Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.

Mat 25:41  Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles.

 

Ya sabemos que Dios si se enoja, a Dios le molesta la murmuración al murmurar en contra de nuestros pastores, esposa, esposo, hijos, o padres ofendemos a Dios.

                                                                         Conclución:

 

Dios nos invita a la unidad, somos una familia, somos hermanos, estamos madurando, estamos creciendo, estamos ayunando, estamos orando, estamos poniendo a Dios como nuestra prioridad, lo estamos buscando en espiritú y en verdad, ya no estamos en Egipto, ya no estamos en el desierto, estamos en la tierra prometida, donde abunda leche y miel, tenemos la bendición y la promesa de Jesús que esta con nosotros hasta el fin del mundo, esta palabra es porque el es nuestro consejero admirable, y vino esta mañana a liberarnos de este virus llamado Murmuración, él es nuestro buen pastor y quiere lo mejor para nosotros y nos guía a la victoria porque el es nuestra roca el es camino y nos llevará en él y para él.

 

Tenemos un Dios de propositos, y el proposito de esta mañana es un llamado a la unidad en familia, ya hemos aprendido que y seremos sujetos obedientes y esto producirá unidad, amor, compañerismo, bondad, y se cumple uno de los mandamientos de Jesús amaos los unos con los otros, 

Me sujetaré a mis padres (mamá y papá)

Me sujetaré a mis pastores (pastor y pastora)

Me sujetaré a mis patrones (supervisores)

 

 

Hoy desde este momento declaramos que seremos sujetos a Dios con la ayuda de Jesús.